lunes, 16 de mayo de 2011

Relajo con orden

Hola a todos.
Quienes conozcan a los scouts, quienes sepan de sus actividades, aquellos afortunados que hayan participado en algún campamento o en cualquiera de los eventos en el que decenas de chicos y chicas se reunen en franca camaradería juvenil, sabrán que estos actos siempre tendrán un alto contenido de relajo con orden. Relajo sano en el que los scouters a veces se apoyan para ir desgranando en el espíritu de los más jóvenes los valores de convivencia, lealtad, optimismo, alegría y bien hacer que son propios del Movimiento Scout.

Pensaba en ello el pasado sábado al asistir al XXI Festival de la Canción Scout de Las Palmas en el que siete grupos trataban de alzarse con el honroso título de vencedor, con canciones (de cuya música y letra ellas y ellos eran los únicos culpables, pues son los autores, músicos y arreglistas), con títulos tales como "Grita y canta al viento", "Juanito el Batalla", "Hoy soñé", y otros que dicen de sus aspiraciones, sueños y recuerdos. Al final se alzó con el primer premio -una tenía que ser, aunque todas lo merecían- la canción titulada "¡Cambia el mundo!". En su estribillo cantan la fe que tienen en conseguir el cambio, a mejor, que ambicionan:

"Y aunque la gente diga
que el mundo no va bien
no me importa... lo conseguiré"

Como era de esperar la muchachada alborotó lo suyo entre canción y canción animando de lo lindo, y los 'viejos lobos' se acordaron oportunamente de los damnificados en Lorca y en Japón por los desastres naturales que les han tocado vivir, animando a sus hermanos scouts y a toda la gente de ambos lugares, tan distantes entre sí y tan cercanas ahora en el dolor.

Te deseo un buen día.

3 comentarios:

Chelo dijo...

Nunca participé en esos grupos pero tengo amigos y familiares que si lo hicieron y tienen muy buenos recuerdos. Feliz semana

Francisco Espada dijo...

La juventud es la esperanza y cuando se les infunden valores positivos, como es el caso de esta organización y de alguna otra de jóvenes, es sembrar para el futuro.

Felipe Tajafuerte dijo...

¡Cómo cambian las cosas! Yo a lo que asistí varios años fue a unos campamentos, sólo para varones, donde cantábamos el Cara al sol y Montañas nevadas. La verdad es que tampoco lo pasábamos mal. Eran otros tiempos y una dictadura distinta a la partitocracia actual. Saludos